Cómo no entienden los pseudo economistas, periodistas especializados, políticos incapaces, opinadores generalistas, interpretadores improvisados ? qué:
La inflación es un indicador de que algo no funciona bien en el cuerpo económico. Es igual a la fiebre, un síntoma que algo está mal en el cuerpo humano ya sea por una infección, por virus, bacterias, hongos, protozoos o priones.
Hablar de control de precios es lo mismo que aplicar un antifebril a un enfermo. No soluciona el problema solamente controla el síntoma, no la causa.
Es básico: hay que enfrentar el problema que es el exceso de gasto público que provoca déficit fiscal y su financiación, ya sea con emisión monetaria ó con deuda interna y/o externa. Esa es la causa.
Un vez desatadas las expectativas negativas no hay cómo parar la inflación. Tratar de frenar solo con la tasa de interés únicamente empeora el problema. Estás contienen las expectativas, lo que los agentes económicos esperan para el futuro.
PAREN CON EL EXCESO DE GASTO PÚBLICO EN TODOS SUS NIVELES, NACIONAL, PROVINCIALES Y MUNICIPALES.
EL dólar es un bien más, una moneda que los argentinos utilizan para resguardarse de la INFLACIÓN.
Tampoco es una cuestión de ideologías: capitalismo, socialismo, social democracia, democracias, autocracias !
El dilema de la economía argentina es la existencia de desempleo e inflación en forma concurrente, simultánea. Se quemaron los libros para cualquier economista ortodoxo o algunos políticos defensores de causas perdidas.
Las medidas de Keynes para el manejo de la demanda global son insuficientes ó no válidas; tampoco von Hayek o Fridman pueden dar respuesta por sí mismos para el manejo de la oferta global.
La inflación se combate bajando el consumo, subiendo la tasa de interés, tanto para el consumo como para la inversión, bajando el gasto público y promoviendo las importaciones. Esto provoca mayor desempleo !!!
Al contrario, el desempleo se combate promoviendo el consumo con aumento de salarios, bajando la tasa de interés y los impuestos para mayor inversión, elevando el gasto público sobre todo su calidad y promocionando las exportaciones mejorando el tipo de cambio. Esto genera mayor inflación !!!
Entonces ??? Cómo se sale de este dilema. Hacer todo junto, no se puede.
Mejorar el diagnóstico para acertar con la receta !!!. Elegir el camino gradualista puede ser; pero elegir la avenida con pruebas de aciertos y yerros es durísimo. Trae más desconcierto y confusión que la inflación.
Medidas que bajen la inflación y aumenten el empleo son muy difíciles, hasta inversas, por cierto. Hasta ahora han sido medidas incongruentes: por ejemplo, el BCRA mantiene la tasa de interés alta para bajar la inflación y/o atraer capitales del exterior pero deteriora/quiebra el aparato productivo, el agro y la industria con el agravante heredado de tarifas que sin duda estaban atrasadas como el dólar.
Es necesario practicar cirugía mayor y microcirugía, hilar muy fino. Ser inteligentes, consistentes, coherentes.
Se deben aplicar medidas económicas heterodoxas y una combinación equilibrada entre politicas fiscales, monetarias y cambiarías que impacten en la macroeconomía; a su vez, políticas microconómicas para mejorar la competitividad del país en su conjunto y de las empresas en particular. Mantener el consumo dando trabajo a los que menos tienen, acreditando planes sociales al pago parcial de nuevos empleos; bajando la tasa de interés para aumentar la inversión bruta interna fija; acompañando con la disminución de las cargas sociales, cuotas sindicales y flexibilización laboral; mejorando la calidad de gasto público y, a la vez, bajando impuestos y tasas.
La economía del mundo, capitalista o socialialista, democrática o autoritaria, debe ser competitiva. Los países competitivos abren sus economías, sus fronteras; los otros cierran y/o protegen a sectores no competitivos (compre nacional para que 40 millones de argentinos paguen más caro).
No sé puede competir con las bananas de Ecuador, como Europa no puede competir con la soja o las carnes frescas con altísimo valor agregado de América del Sur. Argentina tiene el complejo sojero más eficiente del mundo; iguales logros se puede obtener en materia de producción de alimentos, biotecnología, poner en marcha Vaca Muerta, extracción de litio, uranio y tecnología nuclear.
Tampoco se puede competir con los salarios baratos chinos o del sudeste asiático; las industrias textil y del plástico, entre otras, están en terapia intensiva,
Argentina tiene que tener un Ministro de Economía que sepa: que conduzca las finanzas públicas sin deficit; la producción agrícola, industrial y minera; la energía, los combustibles y las obras publicas, entre otros… El BCRA solo debe cuidar la oferta monetaria, el valor del peso. El Ministerio del Interior debe contener a los gobernadores para que, por lo menos, no gasten más de lo que reciban de coparticipacion, impuestos y tasas locales.
Este sábado el Ministerio de Agroindustria abrirá sus puertas a la comunidad durante lo que ya se está transformando en un clásico: la noche de los museos. Las autoridades de la casa han preparado una serie de actividades para contar una larga historia de 119 años. En efecto, el Ministerio de Agroindustria (o de Agricultura, como se llamó hasta antes de que los políticos inventaran ese versito de “industrializar la ruralidad” o ser “supermercado del mundo”), fue creado el 12 de octubre de 1898 por Ley 3727.
Mientras las oficinas de altos techos (y sobre todo los choferes tomando mate) aguardan la llegada de quien será el nuevo ministro, el ex presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, la Noche de los Museos ofrecerá a la gente de a pie la chance de enterarse que el primer ministro también pertenecía a las filas de esa institución gremial. Fue Emilio Frers, uno de los principales impulsores de la siembra de alfalfa en el país. Sí, alfalfa. La soja llegaría muchísimo después.
Más allá de estas historias fascinantes, para los visitantes que esta noche vayan a Paseo Colón 982, la gran atracción será recorrer los pasillos de la vieja construcción diseñada por el estudio Kimbau y Cía. Fue a partir de un decreto de 1911 que asignó la mitad sur de la manzana comprendida entre las calles Paseo Colón, Carlos Calvo y Azopardo para la construcción de un Asilo Nocturno para la ciudad. Tenía 51,96 metros de frente. El sueño del pibe, pero para albergar un grupo de menesterosos que no tenían donde caerse muertos.
Dicho edificio se proyectó para dar albergue a 100 mujeres, 25 niñas, 45 niños y 370 hombres, es decir, en total a 540 personas. Se proyectó con “oficinas, comedores, baños, peluquerías, cocinas, depósitos varios, casita para el administrador, una enfermería, talleres, escuela y otros anexos necesarios; también lavadero y caballerizas; estos dos últimos en edificio aparte”.
¡Mirá si había lugar! De todos modos, actualmente no da abasto para los más de 7.000 empleados que tiene esa cartera y hubo que salir a alquilar otros edificios vecinos. Y eso que había varios “empleados” de le gestión de Julián Domínguez que hasta hace poco ni aparecían o iban a trabajar apenas unas pocas horas cada semana.
De estilo neogótico, con algunos retoques vinculados al estilo Tudor y otros renacentistas, el primer edificio que actualmente alberga a Agroindustria demandó varios años. Luego vino un segundo edificio idéntico, que se inauguró en 1931 y que ocupó originalmente una empresa llamada YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales), bastante chica por ese entonces.
Recién en 1938 ambas construcciones pasaron a ser la sede de la entonces Secretaría de Agricultura y Ganadería de la Nación.
Pero volvamos a esta noche, la noche de los museos. Quienes concurran a la sede del Ministerio de Agroindustria posiblemente puedan cruzarse con algunos de los fantasmas que, es vox pópuli, merodean por los pasillos de ese Ministerio.
Hay muchos fantasmas, pero los más populares de todos, por sus alaridos y gritos de desolación, son los famosos “secretarios fantasmas del 2001”.
Se trata de criaturas casi mitológicas: personas que en medio de la crisis institucional más profunda que vivió la Argentina estuvieron a punto de asumir en el principal cargo de la política agropecuaria local, pero finalmente o no pudieron hacerlo o lo hicieron durante apenas unas pocas horas.
De allí los lamentos que todavía se escuchan por las noches en el viejo edificio de Paseo Colón.
Uno de esos fantasmas todavía pulula por allí y hasta se lo menciona para ocupar una silla en la nueva gestión de Etchevehere. Se llama Bernardo Cané, es veterinario y se hizo conocido en la década de los noventa, cuando en la gestión de Carlos Menem el país lograba dominar la fiebre aftosa. Cané estaba entonces a cargo del Senasa y pocos recuerdan que estuvo a punto de ser secretario de Agricultura en marzo de 2001, cuando Domingo Cavallo regresó a la vida pública como hombre fuerte del gobierno de la Alianza. ¿Recuerdan?
Hagamos memoria. A principios de marzo de ese año, después de meses de ocultamiento por parte de la gestión de Antonio Berhongaray, estalla la crisis de la aftosa. En simultáneo también estalla la crisis económica y asume el “bulldog” Ricardo López Murphy. Tan fuerte era el ajuste que proponía que su gestión duró apenas una semana: el 21 de marzo era reemplazado por Cavallo. Pero, en medio, el área de Agroindustria vivió una gran zozobra: fue reducirda apenas a una Subsecretaría que iba a depender de la Secretaría de Producción que durante esos escasos días estuvo al mando de Víctor Savanti, un ex presidente de IBM.
De esa semana son los primeros fantasmas que hoy pululan sin destino por la sede de Agroindustria: para ocupar la degradada Subsecretaría surgieron entonces nombres como los de Eduardo Manciana o la economista Beatriz Nofal. Ambos se quedaron con las ganas.
Con el desembarco de Cavallo y el alejamiento de López Murphy, Agricultura recuperó su rango y el nombre de Cané comenzó a sonar fuerte para ser secretario. Durá apenas unas horas, pues finalmente asumió Marcelo Regúnaga y Cané fue enviado nuevamente al Senasa para hacer lo que sabía hacer bien: arreglar con el monopolio, vacunar y a otra cosa mariposa.
Cané es desde entonces como un alma en pena. A los pocos meses hasta se lo vio refugiado como ignoto asesor de un ex ministro de la Producción de Eduardo Duhalde, un tal Aníbal Fernández.
No son los únicos “secretarios fantasma” que dejó la crisis de 2001, que como todos sabemos desencadenó en el cacerolazo, las marchas de diciembre, la mortal represión, la renuncia de Cavallo y la huida del ex presidente Fernando de la Rúa.
Quienes concurran a la noche de los museos quizás puedan encontarse en un pasillo también con Jesús Leguiza. Un avezado economista correntino.
Leguiza tuvo dos experiencias que lo llevaron a ser “el eterno candidato”. La primera data fue de abril de 1999, cuando de la economía se ocupaba un economista llamado Roque Fernández. En aquel momento los cordoboses de Juan Manuel De la Sota (que había apoyado la reelección del caudillo Carlos Menem, aunque ahora se haga el distraído) habían copado el viejo asilo de Paseo Colón y uno de ellos, llamado Gumersindo Alonso, era el secretario. Pero Roque Fernández decidió reemplazarlo sin pedir permiso a Menem. En aquel momento Leguiza era subsecretario y su nombre sonó durante un par de días para asumir para asumir esa cartera.
Casi dos años después, tras la violenta crisis de fin de 2001 y cuando comenzaba la reconstrucción institucional de la Argentina, le llegó el turno de la revancha a este correntino, un técnico muy eficiente que conocía al dedillo los pliegues de la política agropecuaria, pues había acompañado casi todas las gestiones desde que Felipe Solá habitara el museo de Paseo Colón.
El 23 de diciembre de 2001, la asamblea legislativa proclamó como nuevo presidente al puntano Adolfo Rodríguez Saá. De inmediato surgió el nombre de Jesús Leguiza para hacerse cargo de Agricultura. Era número puesto y su nombre formó parte de los anuncios.
Pero la ilusión duró apenas ocho días. El 30 de diciembre de 2001 el Adolfo renunciaba y 48 horas después era reemplazado por Duhalde, aunque Leguiza tuvo que quedarse hasta fines de marzo del 2002, dado que se tuvo que reformar la estructura organizacional de dicha Secretaría a pedido de De Mendiguren, el nuevo Secretario de Produción de Duhalde.
Desde entonces pueden escucharse por las noches sordos «sapucai» de dolor en el palacio de Agroindustria de la Av. Paseo Colón.
El derecho real de superficie, proveniente del Derecho Romano y usado en muchos países, estaba expresamente excluido del primer Código Civil para ratificar la propiedad privada y la economía liberal.
Vélez Sarsfield
Es así que Dalmacio Vélez Sarsfield no incluyó el derecho real de superficie en el catálogo del artículo 2502 del primer Código Civil, prohibiendo expresamente el derecho real de superficie, la enfiteusis y la división horizontal de la propiedad de los inmuebles, arts. 2518, 2519, 2614, 2617 y concordantes.
En el año 2001 se sanciona y promulga la Ley 25.509. Es publicada en el Boletín Oficial el 17 de diciembre. Por esta Ley, que modifica el Código Civil, se consagró por primera vez el derecho real de superficie, en el marco de la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados.
Código Civil y Comercial/ 2015
Con la reforma y unificación del Código Civil con el Código de Comercio, en 2015, se amplió la figura jurídica.
El nuevo Derecho Real de Superficie está contenido en el Título VII, Superficie, en los arts. 2114 a 2128:
ARTICULO 2114.- Concepto. El derecho de superficie es un derecho real temporario, que se constituye sobre un inmueble ajeno, que otorga a su titular la facultad de uso, goce y disposición material y jurídica del derecho de plantar, forestar o construir, o sobre lo plantado, forestado o construido en el terreno, el vuelo o el subsuelo, según las modalidades de su ejercicio y plazo de duración establecidos en el título suficiente para su constitución y dentro de lo previsto en este Título y las leyes especiales.
ARTICULO 2115.- Modalidades. El superficiario puede realizar construcciones, plantaciones o forestaciones sobre la rasante, vuelo y subsuelo del inmueble ajeno, haciendo propio lo plantado, forestado o construido.
También puede constituirse el derecho sobre plantaciones, forestaciones o construcciones ya existentes, atribuyendo al superficiario su propiedad.
En ambas modalidades, el derecho del superficiario coexiste con la propiedad separada del titular del suelo.
ARTICULO 2116.- Emplazamiento. El derecho de superficie puede constituirse sobre todo el inmueble o sobre una parte determinada, con proyección en el espacio aéreo o en el subsuelo, o sobre construcciones ya existentes aun dentro del régimen de propiedad horizontal.
La extensión del inmueble afectado puede ser mayor que la necesaria para la plantación, forestación o construcción, pero debe ser útil para su aprovechamiento.
ARTICULO 2117.- Plazos. El plazo convenido en el título de adquisición no puede exceder de setenta años cuando se trata de construcciones y de cincuenta años para las forestaciones y plantaciones, ambos contados desde la adquisición del derecho de superficie. El plazo convenido puede ser prorrogado siempre que no exceda de los plazos máximos.
ARTICULO 2118.- Legitimación. Están facultados para constituir el derecho de superficie los titulares de los derechos reales de dominio, condominio y propiedad horizontal.
ARTICULO 2119.- Adquisición. El derecho de superficie se constituye por contrato oneroso o gratuito y puede ser transmitido por actos entre vivos o por causa de muerte. No puede adquirirse por usucapión. La prescripción breve es admisible a los efectos del saneamiento del justo título.
ARTICULO 2120.- Facultades del superficiario. El titular del derecho de superficie está facultado para constituir derechos reales de garantía sobre el derecho de construir, plantar o forestar o sobre la propiedad superficiaria, limitados, en ambos casos, al plazo de duración del derecho de superficie.
El superficiario puede afectar la construcción al régimen de la propiedad horizontal, con separación del terreno perteneciente al propietario excepto pacto en contrario; puede transmitir y gravar como inmuebles independientes las viviendas, locales u otras unidades privativas, durante el plazo del derecho de superficie, sin necesidad de consentimiento del propietario.
ARTICULO 2121.- Facultades del propietario. El propietario conserva la disposición material y jurídica que corresponde a su derecho, siempre que las ejerza sin turbar el derecho del superficiario.
ARTICULO 2122.- Destrucción de la propiedad superficiaria. La propiedad superficiaria no se extingue, excepto pacto en contrario, por la destrucción de lo construido, plantado o forestado, si el superficiario construye, nuevamente dentro del plazo de seis años, que se reduce a tres años para plantar o forestar.
ARTICULO 2123.- Subsistencia y transmisión de las obligaciones. La transmisión del derecho comprende las obligaciones del superficiario.
La renuncia del derecho por el superficiario, su desuso o abandono, no lo liberan de sus obligaciones legales o contractuales.
ARTICULO 2124.- Extinción. El derecho de construir, plantar o forestar se extingue por renuncia expresa, vencimiento del plazo, cumplimiento de una condición resolutoria, por consolidación y por el no uso durante diez años, para el derecho a construir, y de cinco, para el derecho a plantar o forestar.
ARTICULO 2125.- Efectos de la extinción. Al momento de la extinción del derecho de superficie por el cumplimiento del plazo convencional o legal, el propietario del suelo hace suyo lo construido, plantado o forestado, libre de los derechos reales o personales impuestos por el superficiario.
Si el derecho de superficie se extingue antes del cumplimiento del plazo legal o convencional, los derechos reales constituidos sobre la superficie o sobre el suelo continúan gravando separadamente las dos parcelas, como si no hubiese habido extinción, hasta el transcurso del plazo del derecho de superficie.
Subsisten también los derechos personales durante el tiempo establecido.
ARTICULO 2126.- Indemnización al superficiario. Producida la extinción del derecho de superficie, el titular del derecho real sobre el suelo debe indemnizar al superficiario, excepto pacto en contrario. El monto de la indemnización es fijado por las partes en el acto constitutivo del derecho real de superficie, o en acuerdos posteriores.
En subsidio, a los efectos de establecer el monto de la indemnización, se toman en cuenta los valores subsistentes incorporados por el superficiario durante los dos últimos años, descontada la amortización.
ARTICULO 2127.- Normas aplicables al derecho de superficie. Son de aplicación supletoria las normas relativas a las limitaciones del uso y goce en el derecho de usufructo, sin perjuicio de lo que las partes hayan pactado al respecto en el acto constitutivo.
ARTICULO 2128.- Normas aplicables a la propiedad superficiaria. Si el derecho de superficie se ejerce sobre una construcción, plantación o forestación ya existente, se le aplican las reglas previstas para el caso de propiedad superficiaria, la que a su vez queda sujeta a las normas del dominio revocable sobre cosas inmuebles en tanto sean compatibles y no estén modificadas por las previstas en este Título
Conclusión
En dos palabras el derecho de superficie es la separación entre el suelo y el «vuelo», o sea lo implantado sobre el mismo.
Se incorpora, a los alcances del derecho de superficie, la fruticultura, olivicultura, agricultura anual y otras actividades como la construcción, además de la forestal que ya existía desde el año 2001.
Es importante y justo destacar las acciones que se hacen bien por parte de quienes gobiernan.
Tal como se indica en los fundamentos del Plan Belgrano, “la Argentina tiene una deuda con todas sus provincias del Norte”. Por ello, las diez provincias de la región: Salta, Jujuy, Catamarca, La Rioja, Tucumán, Santiago del Estero, Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones deben ser compensadas por tantos años de indiferencia y olvido. Muchas de ellas, desde la colonia, lucharon por la independencia de la Corona Española, luego participaron de las guerras intestinas, en la organización nacional y forjaron la formación de la República.
Este Gobierno reconoce la deuda con el Norte y con su gente, para ello intentando saldarla, ha diseñado el Plan Belgrano, cuya denominación, no es para nada gratuita, dado el papel que tuvo en la historia y en la misma región el fundador de nuestra bandera nacional.
… y La Rioja
Finalidad:
Si bien el Plan Belgrano prevé fomentar la citricultura, la producción de bioetanol como fuente de energía, la forestación y el turismo, así como también mejorar el Fondo Nacional del Tabaco y el Fondo Algodonero, es necesario ampliar la finalidad y los objetivos originalmente previstos.
El Ministerio de Agroindustria, recientemente creado, posee condiciones suficientes para contribuir con el Plan mencionado y principalmente expandir su alcance, dada su capacidad institucional y técnica, como la fortaleza de sus organismos descentralizados; cuenta, además, con oficinas en el territorio y con conocimientos de las actividades productivas de esa vasta región del norte.
Objetivo:
El Plan Belgrano, aparte de los cuatro grandes programas, a saber: a) Infraestructura; b) Pobreza Cero; c) Terminar con el Narcotráfico; y, d) Unir a los Argentinos, requiere, en esta instancia, de un nuevo componente: El “Programa de Recuperación y Desarrollo Agropecuario, Forestal y Agroindustria”. Por ello, el Ministerio de Agroindustria podría presentar a manera de propuesta las siguientes medidas de política sectorial para fortalecer al Plan, porque no podrán lograrse los resultados esperados sin la participación de las fuerzas de la producción con la correspondiente incorporación del potencial productivo latente en la región.
Condición básica o elemental
Es importante remarcar, que el tipo de cambio de equilibrio, debe ser restablecido. Este se vincula con la tasa de interés y las expectativas de inflación. Es necesario disminuir drásticamente el déficit fiscal generador de la inflación monetaria. El tipo de cambio de equilibrio es fácil de conocer, no necesita demasiada ciencia. El mejor indicador es el flujo de turistas: cuando circulan demasiados visitantes extranjeros el peso está subvaluado y cuando los residentes locales parten en grandes contingentes al exterior, es porque el peso está sobrevaluado.
Obviamente, esta condición macroeconómica excede las funciones del Ministerio, pero es necesario tener muy claro este tema de política fiscal, monetaria y cambiaria para evitar capas y capas de confusión y argumentaciones de todo tipo por parte de los agentes económicos.
Solucionado este problema, difícil por cierto, es más fácil detectar los problemas reales de eficiencia y eficacia productiva o de competitividad de las empresas, actividades y/o sectores productivos. Evitando, además, requerimientos de políticas diferenciales de tasas de interés, de tipo de cambio y/o de impuestos distorsivos; aunque, en el corto plazo, puedan ser utilizados algunos de ellos como instrumentos de reactivación productiva.
Componentes:
A-Fiscal:
Con el fin de promocionar la actividad agropecuaria, forestal y agroindustrial se propone volver a poner en vigencia los sistemas de promoción fiscal que permitieron a varias provincias argentinas, entre ellas a Chaco y Corrientes, pertenecientes al Norte Grande, ampliar las capacidades productivas de empresas existentes. En esta oportunidad, este Ministerio propicia la elaboración de una norma legislativa similar para las 10 provincias que conforman la región, con la diferencia que los beneficios fiscales de aplicarán a empresas nuevas e inversiones también nuevas, dado que al no existir al momento de la promulgación dichas actividades no generarán costos fiscales.
El gobierno de la Nación podrá aplicar un monto de 100 millones de pesos ó más por año y por provincia por el término de 4 años. Cada provincia tendrá así un cupo para la promoción de las actividades en los subsectores agroindustriales Estos recursos se pueden aplicar como descuento del monto del 15 % de los reclamos existentes, que en materia del traspaso de las cajas de jubilación y previsión social, realizan las provincias por la decisión de la Corte Suprema a favor de Santa Fé y Córdoba; aunque en su momento otras hayan renunciado a sus derechos por refinanciaciones de deudas exigidas por el Estado Nacional.
Las provincias realizarán la selección de actividades y proyectos a ser beneficiados con sus respectivos incentivos fiscales, los cuales serán aprobados por la autoridad de aplicación, el Ministerio de Agroindustria.
Esta idea central constituye la propuesta a) y luego siguen otras, algunas de las cuales fueron presentadas por los Ex Secretarios de Agricultura y también por los integrantes del Grupo GAPU.
Medidas concretas:
Recreación y ampliación de los alcances de la Ley 24764, Decreto 494/97 y Decreto 1496/97. Esta Ley de Presupuesto solo prorrogó los regímenes vigentes y estableció el cupo global al que se refiere el artículo 10 de la ley 21.608. También prorrogó, hasta el 31 de diciembre de 1997, los regímenes establecidos en las leyes 22.021, 22.702, 22.973 y sus modificaciones para aprobar nuevos proyectos no industriales en las provincias de La Rioja, Catamarca y San Juan. Medidas fiscales que bajen la presión tributaria efectiva. Reformas fiscales que faciliten la tarea de liquidación y pago de las empresas en general y de la pymes en particular. Eliminar las duplicaciones o superposiciones de impuestos nacionales, provinciales y municipales, por ejemplo a la propiedad. Permitir el ajuste por inflación en los balances. Eximir del impuesto a las ganancias a las empresas que reinviertan en bienes de capital y aumenten la capacidad de producción. Gravar ganancias reales y no ficticias generadas por la inflación. Permitir la amortización acelerada de inversiones nuevas y fijas Eliminar la alícuota del 10,5 % del IVA para frutas y hortalizas frescas. Implementar la devolución rápida del IVA en las exportaciones y los reintegros de los impuestos internos. En el caso de los impuestos a las exportaciones, retenciones a la soja, cambiar la denominación y considerar como un adelanto del impuesto a las ganancias; así no se pierden ingresos fiscales y se cobra a todas las cadenas del agro, tal como se venía aplicando hasta fines del 2015. Negociar con todas las provincias para que destinen el 100 % del impuesto inmobiliario rural y tasa vial en obras de infraestructura local (puentes alcantarillas, electrificación rural, mejoramiento y mantenimiento de los sistemas de riego y caminos rurales). Tomar el impuesto al cheque (impuesto a los débitos y créditos bancarios) como pago a cuenta de otros impuestos nacionales. Elevar los mínimos en bienes personales. Eliminación del mismo, en el mediano plazo, al igual que el impuesto de la renta mínima presunta. B– Laboral y Previsional:
Los primeros planes de empleo se crearon en 1996, con los levantamientos de Cutral-Có y Plaza Huincul, en Neuquén, tras la privatización de YPF. Fue la respuesta del gobierno de entonces a los crecientes niveles de conflicto social. Apenas superaban los 200.000 planes.
Los planes de empleo en los últimos años, además aumentar exponencialmente, tergiversaron la cultura del trabajo, empeoraron la creación de empleo genuino, dado que los beneficiarios, en general, no querían/quieren ser tomados como empleados en blanco porque perdían/pierden su “beneficios”.
Dada la situación del país, con alta inflación y desempleo, es necesario crear las condiciones, por lo menos durante 6 meses ó un año, para que las empresas puedan tomar empleados, permanentes o transitorios, permitan pasar el periodo de prueba, capaciten y, sobre todo, se disminuyan los aportes patronales y se permita así que los nuevos salarios genuinos y sus incrementos sustituyan, en igual proporción y medida, el plan de empleo. Ello en plena coordinación con las áreas responsables de los planes, el Ministerio de Desarrollo Social y el Ministerio de Trabajo, además de otros mecanismos o instrumentos que se enumeran a continuación.
Medidas concretas:
Permitir sustituir con salario genuino los planes de empleo o trabajo en igual proporción No cobrar aportes durante el periodo de prueba de los nuevos empleados. Bajar los aportes patronales por el periodo de reactivación. El Ministerio de Trabajo colaborará con quienes generan empleo, ahora en “negro”, a fin de lograr mecanismos admisibles para los empleadores; y que éstos no serán perseguidos y/o castigados como evasores. Mantener el programa de Recuperación Productiva del Ministerio de Trabajo (REPRO) Promover los Convenios de Corresponsabilidad Gremial y asegurar que las retenciones de los agentes recaudadores ingresen efectivamente al Estado Nacional. De esta manera no se repetirá el fracaso de una misma Ley derogada en los años ’90. Mejorar la Ley Nacional de Trabajo Agrario mediante decreto reglamentario, en particular la situación de los trabajadores llamados “golondrina”. C-Apoyo Financiero y bancario
Se aplicará un 20 % de la capacidad prestable del sistema bancario para financiar nuevos proyectos de inversión en las provincias beneficiadas y el Ministerio de Agroindustria tendrá una partida presupuestaria anual especial para subsidiar la tasa de interés vigente en el BNA para préstamos de mediano y largo plazo, la cual se usará como referencia en el resto de los bancos que decidan adherirse como bancos de primer piso, los cuales a su vez, tendrán un tratamiento especial en los encajes exigidos por el BCRA para mejorar su propia capacidad prestable.
También es necesario recrear las relaciones con la Banca Multilateral de Crédito (BID-BIRF-IFAD) para que el BNA o el Bice actúen como bancos de segundo piso y represten al resto de los bancos del sistema financiero para operaciones de financiamiento a mediano plazo, tanto para inversiones fijas como para capital de trabajo, que también es una inversión.
Medidas concretas:
Propiciar el aumento de la capacidad prestable del sistema financiero a través de disminuciones de los encajes establecidos por el BCRA con tasas diferenciales regionales, sobre todo para el norte. Mantener la oferta de crédito promocional, con aportes del Tesoro, como el financiamiento promocional del la línea del Bicentenario y sin que dichos préstamos resten capacidad de endeudamiento de las empresas. Aclarar y normar por el BCRA para que, en los préstamos de inversión, la puesta en marcha o puesta a punto de las líneas o procesos productivos sean parte del capital de trabajo, que como se mencionó es una inversión de mediano y largo plazo. Mejorar las calificaciones, tanto de estado de cartera como de los parámetros de calificación de los estados contables (Tratado de Basilea II) D-Investigación y Desarrollo Tecnológico (I&DT):
Los organismos descentralizados del Ministerio de Agroindustria, principalmente el INTA, poseen suficiente experiencia, idoneidad y presencia física en la región, con Delegaciones Regionales, Campos Experimentales y Agencias de Extensión de manera que será muy útil la participación activa de esta institución, a la cual se deberá sumar el INTI, que mantiene entre sus actividades programas de investigación y desarrollo vinculados a la agroindustria. Para ello, se propone realizar un acuerdo formal que promueva el trabajo y la acción conjunta, al igual que con el Ministerio de Ciencia y Tecnología, el CONICET y otras dependencias del Estado vinculadas a la generación y transferencia de técnicas productivas.
Medidas concretas
Mantener y aumentar las relaciones de intercambio con los organismos dedicados a la I&DT. Crear un nuevo “Cambio Rural” con el INTA y con el INTI que se denomine “Cambio Agroindustrial para el Norte”, con un presupuesto para se formen grupos de productores por cadenas productivas. También se puede mantener el apoyo a los productores primarios, sobre todo a los que más tecnología necesitan. Asesorar sobre el uso de maquinarias agrícolas sofisticadas y nuevos equipamientos y tecnología, como drones, agricultura de precisión, genética, transgénicos, promover el uso de pasturas tropicales, y adecuado uso del agua superficial y subterránea. Revitalizar el INTEA, Sociedad Anónima perteneciente al INTA, para promover la I&DT en forma asociada con el sector privado, local y extranjero. Por otra, este un instrumento ideal para que el Estado cobre regalías, royalties, derechos, patentes y otros derechos privados por propiedad intelectual. E-Desarrollo Institucional:
En materia de desarrollo institucional se ha dado un gran paso con la creación del Ministerio de Agroindustria, el cual pasó por varias etapas y denominaciones, aunque por más de 70 años fue reconocido oficialmente como un Ministerio. Originalmente en el siglo IXX, en el Ministerio de Interior, Sarmiento creó el Departamento de Agricultura a semejanza del Departamento de Estado de EEUU vinculado al agro.
Asimismo, también ha sido acertada la creación del Plan Belgrano. Este nuevo instrumento o institución deberá tener como misión crear en cada jurisdicción provincial una Agencia de Desarrollo Provincial (ADP) para la ejecución del Plan, lo cual no implica la centralización de la ejecución de obras y actividades, sino en la coordinación institucional y en el seguimiento de las actividades de cada área del gobierno provincial con los responsables de las acciones en terreno, ya sea salud, obras públicas o las mismas aquí propuestas. En la década del ’60 existía el CONADE y cada provincia tenía su propio organismo de planificación y desarrollo como del COPADE de la provincia del Neuquén, que ya cumplió 50 años; en algunas provincias continúan con similares funciones aunque en otras áreas y en otras perdieron vigencia.
Medidas concretas:
Transformar el Consejo Federal Agropecuario (CFA), en Consejo Federal Agroindustrial. Transformar y concentrar, en cada jurisdicción provincial, las decenas de oficinas nacionales de programas y proyectos, en una Agencia Provincial Agroindustrial o en una Agencia para el Plan Belgrano. Aclarar y normar por el BCRA para que, en los préstamos de inversión, la puesta en marcha o puesta a punto de las líneas o procesos productivos sean parte del capital de trabajo, que como se mencionó es una inversión de mediano y largo plazo. Crear una pequeña Oficina para concentrar la coordinación política de las tareas que se llevan a cabo con organismos regionales supranacionales como el Eje Capricornio, Zicosur, Unasur, y organismos financieros como la Corporación Andina de Fomento (CAF) o el Fondo de Desarrollo del Mercosur, Unión Europea, tratados bilaterales, etc F-Otros temas importantes:
Si bien las 5 propuestas anteriores no cubren con toda la problemática del campo y la agroindustria, es importante mencionar otras medidas que deberán tomarse, quizás más adelante, pero que resultan sustantivas para el reordenamiento del sector agroindustrial y actividades conexas.
Medidas concretas:
Políticas comerciales y recuperación de mercados perdidos en el exterior. Eliminación de precios sugeridos, controlados, cuidados. Aunque deberá haber un mayor control en las grandes cadenas de ventas por posición dominante (supermercados) que abusan de los proveedores y de los consumidores. Restablecer la política pública de producción de biodiesel. Facilitar y acelerar los mecanismos para la aprobación de eventos transgénicos. En la Ley de Semillas, aclarar el derecho de uso propio del agricultor, el derecho obtentor y la excepcionalidad del fitomejorador. Aprobar la ley de presupuestos mínimos de ordenamiento territorial para contar con una estrategia del uso del suelo y resolución de conflictos. Aprobar la ley de presupuestos mínimos para el manejo y uso de agroquímicos. Promoción de mercados locales para la agricultura familiar o productores en situación de pobreza. Realizar un plan nacional para el abastecimiento de agua potable para el poblador rural. Orientar el uso de agua para riego, tanto superficial como subterránea. Plan Nacional de Seguridad Alimentaria, sobre todo, combatir la desnutrición infantil, mediante el uso de proteína de soja, la proteína más accesible y barata: Un kg de soja, equivale en materia de proteína a 4 kg de carnes, a 11 litros de leche y a 60 claras de huevo. Inversiones, gastos previstos y su financiamiento
Una vez determinadas las principales líneas de acción y políticas seleccionadas se estudiarán, por cada área especializada, los costos de las inversiones y su correspondiente financiamiento por la banca privada y pública nacional o multilateral. En este último caso, se determinarán presupuestariamente las necesidades anuales para el apoyo indirecto a través de la tasa de interés nominal, la cual estará en relación directa con disminución de las tasas de interés nominales y la inflación, es decir la tasa de interés real.
Por otra parte, se determinarán, en caso que existan, los costos fiscales por las exenciones y tratamientos impositivos y previsionales. Es importante aclarar, que en caso de actividades productivas nuevas, que en la actualidad no existan, el costo fiscal o el costo de oportunidad es cero. Dichas actividades productivas, una vez consolidadas, pasarán a pagar los tributos y contribuciones tal como realizan todos los sectores de la producción y el trabajo.
Organización para la ejecución y participación del Ministerio de Agroindustria:
El Ministerio de Agroindustria creará un área especial, con personal capacitado y existente, que mediante reasignaciones de funciones conformarán un equipo especial para la ejecución del componente aquí propuesto, o sea, el Programa de Recuperación y Desarrollo Agropecuario, Forestal y Agroindustrial del Norte Argentino: “NUEVO NORTE”
Plazo de ejecución:
Muchas medidas concretas tendrán un plazo de inicio de ejecución, que en algunos casos será inmediato y en otros dependerá de tiempos ajenos a la voluntad de Ministerio, como los de orden legislativo y de jurisdicción de otras áreas de gobierno. No obstante todas deberán tender a transformarse en Políticas de Estado para lograr estabilidad institucional y que respeten el concepto de República.
Seguimiento:
El éxito de la ejecución del Plan Belgrano, de por sí muy complejo dada la intervención de distintas áreas de gobierno, dependerá de contar con un equipo de personal que se dedique a la programación y el seguimiento de los planes, programas y proyectos por cada provincia. Para ello se utilizará la metodología de marco lógico que es aplicada por distintas áreas del Poder Ejecutivo, sobre todo, aquellas que han tenido oportunidad de trabajar con el Banco Mundial y/o el Banco Interamericano de Desarrollo.
En igual sentido se debe coordinar con dichos organismos multilaterales de crédito las actividades en terreno, dado que todavía subsiste la cultura de trabajar por proyectos como si fueran independientes. No obstante, el Ministerio de Hacienda y Finanzas y la propia Jefatura de Gabinete cuentan con oficinas encargadas de realizar dicha tarea para que esas áreas estén informadas, aunque no cumplan funciones a nivel de territorio.
Resultados esperados:
No se presentan, en esta oportunidad los resultados cuantitativos esperados de esta propuesta, dado que el objetivo de la misma es que el Ministerio participe activamente y explícitamente en el Plan Belgrano, haciendo uso de sus capacidades instituciones y fortalezas de presencia territorial, principalmente del INTA.
Del más polìtico de los técnicos al más técnico de los políticos